Teoría sobre la “Utopía de la Bondad”

Escrito: Jose

La bondad, gran problema oculto el cual todos ansiamos encontrar y/o resolver (en mi caso al menos), será determinada como “x” (principal incógnita de las ecuaciones a lo largo de la historia de las matemáticas).

Situémonos, nos encontramos en un lugar físico (universidad, instituto, centro de trabajo, instalación deportiva, centro lúdico o cualquier lugar donde realizamos actividades cotidianas de nuestra vida). A dicho lugar físico le daremos el símbolo de otra incógnita mucho más fácil de resolver “y” que sobre ella, además, actuará una fuerza matemática ejercida por un valor que nosotros profesemos sobre él en cuanto a la importancia, respeto, tiempo empleado, necesidad… (ya me entendéis los que trabajáis) cuyo peso vendrá dado por un numero Complejo (5, 2549, -78).

Además añadimos más incógnitas importantes “z” o “t” o “w”, con nuestro peso asignado a cada una de ellas por valor numérico, principalmente estos misterios son: personas de las que esperas recibir bondad, cantidad de bondad que deseas recibir, presencia del antónimo de la bondad, es decir, la maldad (siempre aparece en este tipo de sistema de ecuaciones).

Bueno, pues cuando tú tienes el sistema preparado, analizado y listo para resolverlo, te quiebras la cabeza pero, lo siento amigo, es un sistema indeterminado, ya no con miles de soluciones, directamente sin solución. Vete tú a saber porqué, yo he llegado a una conclusión, la incógnita bondad no existe. Es una utopía, al igual que esa persona que te encuentras una o dos veces en la vida que piensas que es algo imposible de alcanzar de lo perfecta/o que es y acabas olvidándote hasta de su recuerdo. Pues creo señores, que deben ir olvidándose de este adjetivo que a veces parece asomar la cabeza en algunas personas, pero no es más que un oasis en el desierto, cuanto más crees en él, más fácilmente mata tú ilusión.

Ah, se me olvidaba, no miréis en vuestro interior…